La leyenda de Bartolo

#historia 
Cuenta la leyenda que un comerciante o simplemente un gondolero que transportaba mercancías de norte a sur del lago, echo el ancla y se acerco a la zona en cayuco con su ayudante el marinero Bartolo. El patrón bajó a tierra, para hacer negocios o simplemente a pasarlo bien aquella noche de luna oscura, le encargo a Bartolo que se quedará allí en custodia de la embarcación  y que estuviera muy alerta a su regreso. Bartolo haciendo oídos sordos se tumbo a lo largo de aquella barca y entró en un profundo sueño. La leyenda no dice si aquella embarcación que estaba fondeada se fue de allí o fue el mismo Bartolo el que sin querer fue a la deriva en la antigua playa El Bajito, del sector El Milagro.

Despues de pasar un tiempo el
patrón regresó a toda carrera perseguido por dos hombres, cada uno
con un argumento de frío acero en las manos un gran machete en busqueda de descargar toda la furia sobre ese comerciante, cuentan que este viendo el peligro en el que se encontraba gritaba a viva voz,
¡Bartolo!, ¡Bartolo!, tráeme el cayuco. En tanto el muchacho
no lo escuchaba dormido como una piedra.

Descorazonado ante la inutilidad de sus gritos y sintiendo la cercanía del acero a sus carnes, se lanzó a las oscuras
aguas del lago, desapareciendo en las mismas.
El cadáver nunca apareció, pero cuentan las buenas gentes del sector que en algunas noches oscuras se puede escuchar el grito descorazonado del marino: !Bartoloooo! !Bartoloooo!, tráeme el cayuco.

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