¡LLEGO SIN AVISAR!

Y gana a todos los fanáticos del terror que pagan religiosamente su tarifa de Netflix.

"Marianne", el estreno de género más sorprendente del año, llega directamente de Francia y está lista para maldecir nuestras pantallas con una fórmula inteligente e infalible basada en la brujería, el humor, la literatura y la aventura.

Todo un triunfo. Aunque ya es un poco antiguo, para los conocedores y amantes de la temática del terror será sumamente exquisito.

Recuperando algo de esa esencia y referencias, y con su base central en Francia, 'Marianne' nos devuelve con éxito aquellos gloriosos días de la nueva ola de terror francófono que hizo estallar festivales y tiendas de videos hace quince años.

Bustillo, Maury de Aja, Laugier, Gens o du Welz salpican las pantallas del mundo con sus presentaciones.

Siguiendo las reglas del terror tradicional y adaptado a los tiempos del streaming que hemos vivido, Bodin y su equipo técnico y artístico ponen toda su carne a la parrilla a base de ritmo, miedo y credenciales de primera.


Una prueba tangible y sangrienta de terror manual notablemente bien ejecutado, sin disparos al aire o miedos innecesarios basados ​​en algunas de las pesadillas más aterradoras que hemos visto en los últimos tiempos.


Me atrevería a decir que incluso supera con creces gran parte del género de terror actual para la gran pantalla.

Cuando una novelista se toma un descanso de la escritura después de diez años de éxito con una serie de libros de terror, descubre que el demonio de su libro existe en el mundo real.


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