#longread Para leer esta saga hay que tener una mente muy abierta porque es un libro escrito y que se basa en otra época, por lo tanto hay comentarios hacia la mujer muy fuertes, habla mucho de religiones y de lo que era ser una buena mujer o un buen hombre en esa época. Esto era normal y por eso tienen que tener una mente abierta para leer esta saga y pensar que no es lo mismo 1950/1979 a nuestra época actual.

Corre el año 1957, y los Dollanganger parecen una familia perfecta que vive sin preocupaciones en su idílica casa de Gladstone, Pensilvania… hasta que la tragedia llama a su puerta. Ocurre el día en que Christopher, el patriarca de la familia, muere en un accidente. Su viuda, Corrine, debe hacer frente al peso de una gran deuda que no puede asumir. Su única opción: regresar a la mansión de sus acaudalados padres en busca de ayuda. Su madre, Olivia Foxworth, la acoge bajo la cruel condición de que los niños se escondan en el desván.

De esta forma empieza el tormento de los hermanos Dollanganger -Cathy, Chris y los gemelos Carrie y Cory-, víctimas inocentes de pasiones prohibidas y condenados a vivir aislados del mundo.

El día cotidiano de cuatro niños era bastante trágico, no podían abrir las cortinas para no ser vistos, ni gritar o reírse demasiado fuerte, debían esconderse en un ático oscuro, viejo y descuidado una vez a la semana, para que se hiciera la limpieza de su cuarto. La abuela subía muy temprano todos los días para dejarles una canasta con comida suficiente para el resto del día, debían estar siempre bien vestidos, las niñas y los niños dormían juntos respectivamente y nunca deberían usar el baño al mismo tiempo hombre y mujer.
Corrine iba casi diario al principio, y les llevaba regalos y para hacer de su encierro algo no tan aburrido, entre Cathy y Chris se creó una unión y conexión enorme y se volvieron con el paso de los días en los padres postizos de Cory y Carrie.
Y así siguieron pasando los meses y después los años y junto con ellos, la vida.

El libro nos mostrará todo el abuso emocional, físico y verbal que recibirán los niñitos por parte de su abuela. Nos contarán éstas lineas y empatizaremos completamente con esta parte inocente al mismo tiempo que nos sentiremos incapaces de hacer nada por ayudarles.

Flores En El Atico